El Dr. Len afirma que limpiar visualizando un resultado no funciona. Pero cuando usted limpia por limpiar, usted puede ser agradablemente sorprendido por lo que la Divinidad escoge como resultado para usted.
Dice el Dr. Len: “Este es uno de los mayores problemas de los terapeutas, ellos
piensan que están allí para salvar a las personas, cuando en realidad están allí para
limpiarse a sí mismos”.
Con el Ho’oponopono estamos asumiendo la responsabilidad por las memorias en
común que compartimos con otras personas. El intelecto no tiene la capacidad de
asimilar y valorar toda la información que se presenta en relación a cualquier
problema, por tanto no sabemos lo que realmente está sucediendo en momento
alguno.
Dr. Len: “Ser 100% responsables es un camino difícil de andar, porque el intelecto es
muy insistente. Cuando un problema nos aparece, el intelecto siempre busca a
alguien o alguna cosa para culpar. Nosotros seguimos buscando ahí fuera (de
nosotros) el origen de nuestros problemas. No percibimos que el origen está siempre
dentro de nosotros”.
El Dr. Len dice que; “Somos todos Seres Divinos, pero la mente solo puede servir a un maestro a la vez. Puede servir las memorias repitiendo lo problemas, o puede
servir a la Divinidad que son las inspiraciones”.
“El Intelecto tiene que escoger: puede funcionar comandado por los
problemas, o puede funcionar comandado por la inspiración”.
“Debemos estar atentos en tener expectativas en nuestra vida. El limpiar no tiene
nada que ver con las expectativas. No estamos limpiando para salvar la vida de
nadie. El porqué estamos limpiando es para que suceda pacíficamente lo que es
perfecto y correcto en nuestra vida”.
100% DE RESPONSABILIDAD
Necesitamos entender con claridad que la mente es perfecta. Lo que no es
perfecto son los datos y memorias que nuestra mente contiene, y con el
Ho’oponopono es eso lo que estamos trabajando. Estamos cancelando memorias
en común.
Dr. Len: “La definición del Ho’oponopono es corregir un error, y el error es corregido
al decirse: “Te amo, Lo siento mucho, Perdóname y Gracias” al Divino, para
permitir que el Divino vacíe y cancele los datos (las memorias en la Mente
Subconsciente) que experimentamos como problemas.
La Personificación del Divino
El Dr. Len destaca que la profunda palabra hawaiana “Aloha” significa:
Estar en la presencia (Alo) de lo Divino (Ha). Él dice que cuando decimos Aloha a alguien,
estamos reconociendo que aquella persona es el Divino personificado
Len confiesa que el Ho’oponopono es difícil de practicar. No pasa un día que
él no se aborrezca, esté irritado preguntándose: “¿Cómo? o pensando, bueno al
menos él esta consciente, y cuando se percata del tropiezo él vuelve a la limpieza. Él
dice que no pasa un día en el que no dé un tropiezo.
Cuando conseguimos ver el mundo así, es imposible mirar a alguien y juzgarlo, tener
algún preconcepto, en función de su “clase social”, origen, forma de expresarse, del
trabajo que hace, sus elecciones, etc. Aquella persona es Dios expresándose de esa
forma, dentro de aquellas limitaciones en aquél contexto, rico, pobre, o el que sea.
Es bueno recordar siempre que cuando reaccionamos a lo que alguien hace, o lo
criticamos, es porque existe lo mismo dentro de nosotros, son las memorias, energía
que compartimos con aquella persona. Es una óptima oportunidad para limpiarse.
“La única manera en que yo puedo estar en paz es haciendo el Ho’oponopono por
mí, porque yo quiero estar en paz, y porque yo sé que en cuanto estoy en paz
conmigo mismo, me doy cuenta que todos a mi alrededor también están en paz.
Por tanto cuando noto cualquier cosa que puedo percibir como un problema, me
pregunto: ‘¿Qué hay en mí que necesito liberar?’ “.
“Las personas solo aparecen en nuestras vidas para mostrarnos si estamos dentro o
fuera del camino con nuestra propia vida. La mayor parte del tiempo no sabemos si
estamos o no, por eso necesitamos limpiar constantemente”.
“Intentar ayudar a las personas hablándoles, no ayuda. Con el Ho’oponopono yo
traigo paz para mí mismo, y así todos a mi alrededor pueden tener la paz para sí.